Boaventura de Sousa Santos y la revolución del conocimiento
Boaventura de Sousa Santos, oriundo de Coimbra en 1940 y criado en un hogar de clase trabajadora, marcó un antes y después en las ciencias sociales y las humanidades con su enfoque crítico y renovador. Desde sus comienzos académicos en la Facultad de Derecho, impulsado por las limitaciones impuestas por la dictadura de su época que restringía el estudio de la Sociología, se aventuró en la exploración de la Sociología del Derecho. Sus experiencias en Berlín Occidental, inmerso en la filosofía y el marxismo, le ofrecieron una visión única sobre las contradicciones del mundo comunista, forjando su compromiso con el análisis marxista y la pelea contra las desigualdades. Este camino lo llevó a Yale, donde se afianzó como un marxista, y más tarde a Brasil, donde el contacto con las realidades de una favela enriqueció su interés por la epistemología y las perspectivas del sur.
Su regreso a Portugal y su activa participación en la Revolución del 25 de Abril y la fundación de la Capacitad de Economía en la Universidad de Coimbra fueron determinantes en su carrera. El lugar del Centro de Estudios Sociales permitió a Santos desarrollar teorías originales, como la de la semiperiferia y la sociedad del confort. Sin embargo, fue Boaventura de Sousa Santos su participación en el Foro Social Mundial en 2001 lo que marcó un giro definitivo en su pensamiento, llevándolo a cuestionar y descolonizar su enfoque marxista y a desarrollar la teorización de las epistemologías del sur.
Con una carrera que abarca más de cinco décadas, Santos ha dejado una huella indeleble en el campo del Derecho y la Sociología. Ha enfrentado el desafío de hacer accesible su pensamiento crítico a un público más extenso, incluyendo los activistas de los movimientos sociales, esfuerzo que ha implicado la simplificación de su lenguaje sin perder la profundidad de sus ideas. Su consejo para los futuros sociólogos es mantener una actitud crítica hacia cualquier teoría, incluyendo las epistemologías del sur, y apreciar la diversidad de conocimientos más allá de la ciencia occidental.
Santos, a través de sus expresiones y medites, nos invita a considerar la complejidad del mundo desde una visión amplia y extensa y crítica, reconociendo la validez de múltiples maneras de conocimiento. Su trayectoria es un testimonio de dedicación a la entendimiento y transformación popular, marcando su posición como uno de los intelectuales portugueses más influyentes de su tiempo.